sábado, diciembre 05, 2009

quando audace e irresponsabile posso


Questo tempo sabbatico
prima di una partenza, questo tempo
rubato al tempo, questo tempo non mio
né di altri, il tempo della valigia
e del ritardo, questo lusso sospeso,
questo margine ricco,
quando audace e irresponsabile posso
quello che neanche gli anni mi concedono,
dove accorrono i pensieri piú negletti
e sono accolti, e tra un pigiama
e una camicia s'insedia maestoso
ma arrendevole il possibile, dove potrei
persino telefonarti e dichiararmi
folle d'amore, questo unico tempo vero
involontario che ci è dato
per grazia di partenze, questo
non è nient'altro che preghiera.


(Patrizia Cavalli)

El tiempo de la partida. Allá vamos, de nuevo.

No he conseguido el libro que quería leer en el vuelo, no he conseguido un regalo perfecto para mis hermanos, no he conseguido el horario del vuelo sino hasta ahora. Saldré de madrugada, quizá no deba ni dormir. Pasaré por Roma (había olvidado ese detalle) y espero que mi maleta no se queda por allá (suele suceder). Me llevo el White Tiger, que lo comencé hace como 6 meses, con diferentes interrupciones, y el cual tengo en Barcelona sin que, supongo, Stefanie sepa. Stefanie a su vez se lo quitó a Sive la que, supongo, tampoco lo sabe.
En la casa, como en los poemas de Eliot, las mujeres vienen y van. Vemos partidos de futbol, yo peso y sopeso mi maleta. Es un largo viaje, vuelvo a casa, voy a Costa Rica. Se acaban así los viajes del 2009: portadores, murcia, belgica, italia, amsterdam, mi regreso a porto y tú, todo el mar.

imagen de João Ruas